Qué son y Cómo funcionan las SICAV
Autor: Equipo ArriagaContenido del Artículo
¿Qué es una SICAV?
Las denominadas SICAV son sociedades de inversión de capital variable y carácter financiero que adoptan la forma anónima. Son un instrumento de ahorro colectivo y tienen por objeto exclusivo la adquisición, tenencia, disfrute, administración en general y enajenación de valores mobiliarios y otros activos financieros para compensar. Pueden considerarse una especie de fondo de inversión en forma de sociedad anónima (una empresa), de la que los inversores son los accionistas. Los fondos de inversión no tienen personalidad jurídica, al contrario de las SICAV.
¿Cómo se monta una SICAV?
Como toda institución de inversión colectiva, la SICAV está sujeta a la aprobación por la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores) y por lo tanto, sujetas al régimen de supervisión, inspección y sanción de la Ley 35/2003, de 4 de noviembre, de Instituciones de Inversión Colectiva así como de las normas de Derecho de la Unión Europea que contengan preceptos específicamente referidos a las mismas, incluido el Reglamento (UE) n.º 2017/1131, del Parlamento Europeo y del Consejo, de 14 de junio de 2017.
Los requisitos para constituir una SICAV los podemos resumir en los siguientes:
a).- Constituirse como sociedad anónima.
b).- Limitar su objeto social a las actividades establecidas en esta ley.
c).- Disponer del capital social o patrimonio mínimos (2,4 millones de euros).
d).- Contar con los accionistas en el plazo y número legalmente exigible (mínimo 100 accionistas).
e).- Designar un depositario en el caso de las sociedades de inversión de capital variable.
Hay otros requisitos especiales cuando se trata de sociedades de inversión que será de obligado cumplimiento, como es contar con una organización administrativa y contable salvo que su gestión, administración y representación estén encomendadas a una Sociedad Gestora de Instituciones de Inversión Colectiva (SGIIC).
¿Cómo tributan las SICAVs?
La agencia tributaria establece que las SICAV (Sociedad de Inversión de Capital Variable) tributan por el impuesto de Sociedades y se establece un régimen fiscal especial solo para las SICAV reguladas en la Ley 35/2003 que, además, cumplan ciertas condiciones.
El régimen fiscal especial está condicionado al número de accionistas de la SICAV, han de ser un mínimo de 100 accionistas; si es menor de 100 accionistas el régimen fiscal de estas entidades no presenta ninguna particularidad en el impuesto de sociedades, que tributarán de acuerdo con el régimen general, en cuanto al régimen fiscal de sus socios tanto personas físicas como jurídicas, se aplican las normas generales del impuesto personal que corresponda (IRPF o IS) por las rentas derivadas de la participación en el capital de estas sociedades, tanto si se perciben dividendos como si se obtienen ganancias o pérdidas patrimoniales procedentes de la transmisión de dichas participaciones., sin embargo, el régimen fiscal en el Impuesto de Sociedades de las entidades con un número de accionistas igual o superior a 100 están sujetas al tipo de gravamen reducido del 1%, los dividendos que distribuyan están sujetos a retención cualquiera que sea la residencia del perceptor, incluso los que sean percibidos por residentes en países comunitarios distintos de España. Este tipo fiscal tiene un gran impacto en la rentabilidad que obtienen los inversores-accionistas.
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