700.000 españoles han sido víctimas de las preferentes, según el Parlamento Europeo

El Parlamento Europeo cifra en 700.000 españoles los  afectados por las preferentes

FUENTE: en.wikipedia.org

En España más de 700.000 personas han sido afectadas por la comercialización de las preferentes, según datos hechos públicos hace unos días por el Parlamento Europeo.

Para el ente comunitario, la banca española ha actuado “de forma desleal” por su falta de información y protección a los consumidores y por su total desatención al código de buenas prácticas cuando ofrecieron este producto.

Para el Parlamento Europeo, “la información es fundamental para que los ciudadanos puedan tomar decisiones económicas, y los bancos no comprobaron que los clientes tuvieran los conocimientos suficientes para entender los riesgos que asumía con las preferentes”. Además, al Parlamento Europeo le preocupan especialmente los pequeños ahorradores ya que, “como consecuencia de esta venta masiva, algunos ciudadanos han perdido sus hogares e incluso sus ahorros de toda la vida”.

España es el único país europeo en el que las preferentes se han colocado a minoristas ahorradores. Por ello, en infinidad de ocasiones muchos afectados han exigido ante la Eurocámara que atendieran su situación y velaran por sus derechos para que se les devolviera el dinero que tenían atrapados. Sin ir más lejos, en abril del 2015, miles de preferentistas perjudicados denunciaron ante el Parlamento Europeo que los bancos no sólo no informaron adecuadamente a los clientes, sino que en algunos casos les informaron mal: se les dio la impresión de que los productos que iban a contratar eran básicamente depósitos a plazo fijo con total liquidez.

Las cifras de 700.000 afectados por preferentes que baraja la cámara europea son, a su juicio, “los mismos ciudadanos estafados y desahuciados por los bancos que han pagado a la banca su rescate”. El Parlamento Europeo, pues, ha dejado clara su preocupación ante la falta de seguridad en este ámbito; y ha instado a la Comisión Europea a vigilar de cerca la aplicación de la legislación comunitaria particularmente en el caso español, al tiempo que ha destacado la necesidad de denunciar las prácticas abusivas de la banca no sólo en España sino en toda Europa.

Y es que esta postura refuerza la que hemos venido defendiendo en nuestro despacho desde hace ya mucho tiempo y que no es otra que la de que los bancos consideraron de forma errónea a todos los afectados por preferentes como inversores que libremente asumieron los riesgos de este producto tóxico, haciendo creer que lo contrataron con conocimiento de causa a pesar de los innumerables datos y sentencias que han confirmado y siguen confirmando precisamente lo contrario.