Qué hacer para que tus herederos paguen menos por tu herencia (I)

Si no quieres que los impuestos se coman parte de los bienes puedes optar por  algunas medidas

Hay veces que recibir una herencia ya no es un regalo. Muchos herederos se enfrentan al pago de unos impuestos que se comen una buena parte de los bienes recibidos. Pero puedes optar por determinadas medidas para que tus herederos paguen menos por tu herencia.

1.- Donar en vida. Las donaciones se encuentran bonificadas con beneficios fiscales en muchas Comunidades Autónomas, sobre todo si se trata de dinero en efectivo. En el caso de que se transmitan bienes que hayan generado plusvalías (acciones, fondos, viviendas, etc.), ya no son tan ventajosas, porque lo que se ahorra en el Impuesto de Donaciones hay que pagarlo en el de la Renta. Sobre todo, si se trata de un inmueble, que también lleva  añadidos otro tipo de impuestos.

Puedes disminuir el pago de impuestos a tus herederos tomando ciertas medidas

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Lo mejor es donar en vida determinados bienes de forma parcial, aprovechando los beneficios fiscales de tu Comunidad, y dejar para la herencia los que estén exentos de tributar en Sucesiones. Entre estos conceptos exentos al heredar, se encuentran las empresas familiares, la vivienda habitual o determinados seguros de vida, entre otros. En el reparto parcial de bienes en vida, es aconsejable aprovechar los mínimos exentos que algunas Comunidades aplican para transmisiones a hijos. Y el resto, también a la herencia.

2-.- Repartir entre muchos herederos cercanos. Cuanto más herederos, mejor. El Impuesto de Sucesiones es un tributo progresivo, de tal manera que, cuanto más se recibe, más se paga. Por ello, conviene muchas veces dividir la herencia entre todos los beneficiarios posibles, siempre dentro de la ley, claro. Una opción puede ser la de utilizar el tercio de mejora tanto para que hereden los hijos como los nietos, porque en ese tercio de la herencia, no sólo se pueden encuadrar los descendientes directos (como los hijos), sino también los nietos, sin coste tributario adicional.

3.- Aprovechar la exención de la vivienda habitual. Cuando se trate de un inmueble, este bien goza de una reducción de entre el 95% y el 99% de la cuota tributaria, dependiendo de la Comunidad Autónoma en la que se encuentre el inmueble. Por tanto, conviene transmitir este tipo de viviendas en el momento de heredar, y no siempre a través de una donación, porque, en este caso, aunque se aproveche la bonificación autonómica de la donación en vida, ya se está desechando la exención posible en la sucesión futura, con el impacto que ello supondrá.

Dividir la herencia entre todos los beneficiarios posibles es una forma de pagar menos por ella

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4.- Cambiar tu domicilio fiscal a otra Comunidad Autónoma. El Impuesto de Sucesiones y el Impuesto de la Renta es, por ejemplo, más barato en la Comunidad de Madrid y mucho más caro en Andalucía.  Eso sí, no puedes cambiar tu domicilio fiscal exclusivamente para beneficiarte del régimen tributario de tu nueva residencia. El régimen fiscal que se tendrá en cuenta para liquidar el Impuesto de Sucesiones será el de la Comunidad en la que se haya residido más tiempo durante los últimos cinco años previos a la sucesión. Desde nuestro punto de vista ésta es una medida menos aconsejable porque, además, debes de tener una residencia real y efectiva en la nueva Comunidad Autónoma en la que se quiera residir.

Éstas son algunas medidas para hacer que tus herederos paguen menos por tu herencia. Pero no son las únicas. En un próximo post hablaremos de alguna más.

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